¿Hace falta ser agente secreto en alguna ‘misión imposible’ para vivir la experiencia fantasiosa de entrar en alguna sala ‘top secret’ mediante un escaneo de iris?
Quizá no seas Tom Cruise, ni Jason Bourne, quizá ni siquiera tengas un aire al inspector Gadget, pero ya está al alcance de todos algo que hasta hace poco parecía pura ficción: llega el código de retina, una de las formas más segura de bloquear tus archivos y dispositivos.
Ahora todos tenemos cuentas, nombres de usuario y claves para dar y tomar. ¿A qué más de una vez las has confundido y hasta olvidado? Pues para evitar esta insana preocupación, evitar sustos y suplantación de personalidad (esto sí que suena a Sherlock Holmes) se ha creado el Eyelock Myris.
Este pequeño aparatejo es un escáner ocular que registra nuestro iris y genera un código, como una huella digital, para proteger nuestros archivos al usarlo como contraseña.
Sus creadores dicen que es de fácil manejo, simplemente hay que conectarlo por USB al ordenador. Luego, sigue los pasos que te indica el software para añadir páginas y aplicaciones a una base de datos.
Colócalo a la altura de tu ojo, inicia el escaneo -ni te enterarás- y la imagen que recogerá el dispositivo se asociará a tu ID. El Eyelock Myris generará una clave única de 2.048 bits. Ya puedes imaginar la dificultad para imitarlo, es casi tan fiable como una prueba de ADN. Y oye, podrás asociar todas tus contraseñas a tu pupila. Ahora sí, ¡protege tus ojos!
comunicación 2.0, ¿dígame? 